Thursday, March 09, 2006

Esa mirada de pena

Son muchas las decepciones, fracasos y otros menesteres que nos atañen a lo largo de nuestras vidas. Son muchos hijos de putas con muy malas intenciones que pretenden que el mundo sea un poco peor de los que ya es.
De todas formas siempre nos queda el consuelo de poder poner a cada uno en su sitio; devolverle a su statuo quo, a ese cubo de basura que nunca tuvo que abrirse, a ese semáforo en rojo que tuvo que quedarse en esa posición tres mísero segundos más...
A las cosas por su nombre, hay que destrozar ese super-yo que nos impide ver las miserias producidas por los mismo de siempre, por esa gente que siempre va a sus intereses sin saber que la bomba que tiene en sus manos está a punto de explotar...
No sabemos hasta que punto todo tiene un inicio, lo que tenemos que tener claro es que hay un final en toda su globalidad, no verlo nos hace peores (hay que correr esos 30 minutos que dura la vida con la cabeza alta y sabiendo que la bala que pronto nos alcanzará, dolerá más en otros corazones engañados con miradas de pena).