Adiós, adiós

Ya nos temimos lo peor al escuchar la canción "Ya nos vamos" - primer single - de su disco "Si yo fuera Dios" (2003), pensando que era una despedida, un final premonitorio de la carrera de este grupo gallego de Rock´n´roll. No fue así, ya que en el 2005 nos "regalaron" su particular visión de El Bosco con ese cedé tan personal "El jardín de las delicias".
Alrededor de estos dos proyectos, se anunciaba una disolución de la banda por motivos de excesos etílicos cometidos por su cantante Yosi, que ya se hacían explícitos en sus conciertos (caídas, olvidos de letra, etc.). Si bien es cierto que Yosi, en un utimátum de la banda, decidió pedir perdón a sus fans y a sus compañeros e itentar encauzar el grupo Los Suaves, pocos vieron con ojos optimistas estos acercamientos hacia la "reconciliación".

Nada más y nada menos que cinco años han pasado para que depués de la tormenta llegase la calma. Borrón y cuenta nueva. Ya se observa la genialidad del grupo al titular este nuevo disco "Adiós, Adiós" (2010) al hacernos ver que una doble negación es una afirmación, es decir, que los Suaves regresan con un saludo y con mucha dosis de Rock - la primera frase de la primera canción no deja lugar a dudas “Un adiós es un grito que quiere decir bienvenido".

No sé si tenía muchas ganas de escuchar algo nuevo de Los Suaves pero tengo que decir que este disco en particular me ha conmovido, me ha hecho revolverme de gratitud, ha conseguido lo que pocos discos consiguen. Disco tocado con el alma, con muchas ganas de dar a los fans una dosis de buena música, como pocos en España.
Yosi vuelve con letras tristes, esperanzadoras, con estrofas llenas de "profundidad", vuelve con una voz mucho más clara, limpia, desgarradora. Medios tiempos - baladas - que arrebatan el sentido, te sientes como en una burbuja caliente. No hay más que escuchar canciones como "El último pecado", "Miau Miau" o "Frio como una llave"
Temas más "típicos de los suaves" donde la palabra Rock aparece no sólo en el título sino que rebosa en sus composiciones por los cuatro costados "Corre, conejo corre", "Han matado el Rock´n´roll", "Se alza el trueno".

El primer single "Cuando los sueños se van" es un puñetazo en la mesa declarando que ESTÁN aquí, que han vuelto para dar lo mejor de ellos mismos, consiguiendo un disco cuasiperfecto, con múltiples matices, sentimientos y ganas.
Recomiendo encarecidamente que escuchen - y compren - este disco que seguro será catalogado como clave en la discografía de este longevo grupo. No os arrepentiréis.
Me entran temblores cuando veo a Fito y a Bunbury (y sus mediocres nuevos lanzamientos) cosechar en lo alto de las listas de ventas lo que otros grupos, compositores y artistas se mercen mucho más (compositivamente, líricamente y por trayectoria). Pero en fín, eso es harina de otro costal.